Entre filas nos conocimos,
entre filas nos hermanamos,
porque no fue solo portar
el mismo uniforme,
fue compartir el mismo ideal,
manteniendo en alto la moral.
Entre filas nacen amistades eternas,
que se lloran cuando parten
a la eternidad...
Entre filas nace una complicidad
y ese sentido de confidencialidad,
pues en la amistad debe de haber
lealtad.
Entre filas se ríe, se sufre, se llora
y sobre todo se descubre,
qué hay diamantes en bruto,
que el tiempo va puliendo
y un día brillan en todo su esplendor.
Pero un día rompemos filas,
quizás cada quien busque
su propio camino, sin olvidar
que el destinó un día nos hermano.
Hay quienes dan ese paso al frente
y dicen presente...
Ojalá esa dádiva del deber cumplido,
sea una antorcha en la eternidad.
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