Esgrimiendo miradas desafiantes en su enojó, así los miran de reojo, el resto de la clase...Han decidido pedir los guantes, irán a la comandancia y como caballeros, resolverán esa disputa.
Los cuases estudian juntos, hacen chispe junto, se evaden, son integrantes de una misma promoción con un solo corazón , pero nunca faltan las disputas y por ende las peleas; peleas que se suscitan, por pequeñas razones sin razón o con razón: por dañar le sin querer el brillo de las botas, por probocar con su conducta o acción el arresto de la clase, por ser cuero fibrudo o por esas cosas que se dan entre filas...
Pero pelearse, así como si fuera una riña callejera, estaba sansionado por el reglamento(tanto si se hacía dentro de las instalaciones del instituto y más aún fuera en las calles) por eso para resolver esos asuntos existía la instancia de los guantes.
Estando en pleno periodo de clases, el Capitán asimilado Iriarte Echeveria, parecía adivinar aquellas intenciones y sin más preámbulo les preguntava: ¿Quién quiere ponerse los guantes? Y al encontrar respuesta, ni lento, ni perezoso, los llevaba a la comandancia, pues el era entuciastas de los deportes y al terminar el período, se salía a los patios que daban a la piscina y allí los dos se quitaban la camisa, alguien les ayudaba a ponerse los guantes, mientras en los pupitres se organizaban las apuestas y por supuesto, el capitán Iríarte sería elreferí de la pelea.
Los cuases se daban con todo, a veces corría sangre, pero sin importar quien ganó o quien perdió, volverían a las aulas, volverían a formarse entre filas y seguirían forjando esa hermandad de hallistas, que es para toda la vida.
Oxwell L’bu Copyright © 2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario